Seguimiento y Control

Dentro de las herramientas técnicas que podemos identificar a lo largo de nuestras carreras, y dentro del marco de la administración, como emblemas de enseñanzas en el campo teórico, se encuentran las cinco fases que nunca podemos dejar pasar: Planificación, Organización, Dirección, Ejecución y Control. De ellas podemos sugerir otras, o incluso cambiar unas por otras, pero nunca podemos dejar pasar la esencia de ninguna de estas tareas, dentro de un trabajo, por mas efímero que este sea no podemos darnos el lujo de no hacerlo. Cada uno tendrá un valor que permitirá tomar decisiones en función de conseguir el objetivo, quizás unos mas importantes que otro, pero todo de acuerdo a la tarea que se esté desarrollando.

Entre estas actividades existe igualmente, una particularidad que es hacer las mismas tareas dentro de estos, es decir, para planificar también se aplican las otras acciones, y así todas, pero la que te permite descubrir la realidad de que ya dominas la tarea es definitivamente el Control, y si añade a este el seguimiento darías un aumento considerable a los resultados, ya que estarías trasmitiendo que lograste controlar la tarea, y que puedes mejorarlas ya que tienes el control, pero esto no es sencillo, para decir que tienes el Control debes demostrar la dominación que se tiene del tema, o actividad que se está realizando, comprobar que esto es real, tiene sus dificultades.

Ya teniendo el dominio de la tarea, lo cual data del cúmulo de experiencias demostradas, controles desarrollados y resultados calculados y definidos como aporte de que la tarea se está realizando y que está obteniendo los resultados esperados, entonces se peude determinar si se tiene control, y esto viene de esa evaluación constante, para bien o para mal, el resultado siempre será la medición que anunciará el comportamiento, para que la decisiones futuras sean las adecuadas, esta evaluación, que en definitiva es el seguimiento del control hará que nos indique nuestro dominio.

Los indicadores de gerstión, herramienta infalible para detrminar este seguimiento, sería parte de esa estrategia para acumular experiencia, es el cuento del comportamiento que en un tiempo definido podemos manejar para tomar decisiones y acciones de mejora, la medición entonces sería el arma que desde todo punto de vista nos permitiría el seguimiento para determinar el control, la mejora continua sería el paso, o los pasos, que debo tener presente y que sin descanso me llevaría a la excelencia de mi tarea.

Toda un metodología de trabajo arduo sin miramientos negativos, todo lo que pase debe ser evaluado de manera positivo, así el resultado no sea el esperado, se trata de aprender, superar y mejorar.

Eber Morin